ME SIENTO EXTRAÑA

Si no fuese porque una autoridad sanitaria competente me lo negó, pensaría que soy multipolar… Si eso existe.

Multiorgásmica, en cambio,  estoy segura que no, a no ser que el cambio de año haya obrado un milagro. Lo cual aún no puedo saberlo porque no me he estrenado. Como dice mi amiga Charo, de momento somos mujeres vírgenes, porque año nuevo, vida nueva.

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Mientras escribo esto, estoy medio viendo y escuchando un dvd recopilatorio de actuaciones de Rocío Dúrcal.

Me recuerda a cuando yo era pequeña y en mi casa había dos rivalidades: Por un lado mi hermano del Barça y mi padre, por llevarle la contraria, del Real Madrid . Y por el otro mi madre de Rocío Jurado y yo de la Dúrcal, porque “tarde o temprano seré tuya”.  Luego con el tiempo aprendí a amar a las dos.

Ahora viéndola actuar y prestando atención a las letras de las canciones me sorprende que canciones “tan de desamor” me gustasen de pequeñita. Sería un signo de lo que me esperaba.

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Con el año nuevo no me reconozco ni yo,  me han entrado unas ganas tremendas de salir. Tanto que, en teoría, me tenía que quedar los niños para la noche de reyes, así Ramón podía preparar toda la gymkana como tranquilidad, pero le pedí que los llevase con su madre. Soy una mala madre y lo acepto, igual que acepto que desentono y canto fatal. Lo acepto con la misma naturalidad, no pienso sufrir con eso y menos aún sabiendo que están con el mejor padre del mundo. Gracias, Ramón.

(He escrito” Gracias, Ramón” porque el otro día descubrí que sabe que existe este blog… Lo cual pensé que me impediría ser totalmente sincera… Pero luego me he dado cuenta, que “qué coño”, si a Ramón nunca le ha gustado leer nunca. Seguro que si entra no pasa de la primera frase)

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Cuando se acabó la relación con Ramón, yo sufría y solo quería saber cuánto iba a durar ese sufrimiento. Entonces Charo, mi fiel salvadora siempre, me llevó a unas conferencias sobre el luto y allí expusieron una teoría al parecer bastante refutada: “El proceso de desenamoramiento es un diez por ciento del tiempo que ha durado la relación, con un máximo de dos años”… ¿Será por eso que cuando no hay relación es tan veloz?... Que triste, en el fondo

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“Pepa: Que capacidad de recuperación la de Candela. Espero que tenga más suerte que con los Chiitas” (Mujeres al Borde de un ataque de nervios. Pedro Amodovar)

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He conocido a Fx y es el marido perfecto, de libro. Guapo, inteligente, amante del cine y de la literatura, con un trabajo que le gusta… una joya, vamos… Pero estoy tan acojonada de engancharme y que no pase nada que creo que no estoy siendo yo misma.

Estuvimos dos horas juntos sin parar de hablar y al volver a casa, si importarme que eran las tres de la mañana, llamé a Charo para contárselo. La pobre alucinó con mi facilidad de enamoramiento, “enchochamento”, llamadlo como queráis, porque no es algo propio de mí. Yo soy una mujer bastante cerebral y muy difícil de interesarme con facilidad, aunque leyendo este blog puede parecer lo contrario.

El caso es que, a medida que le contaba cosas de Fx, Charo se iba emocionando y me dijo: “Nena, déjamelo a mí que me hace más falta”. Entonces le recordé que de momento las dos somos vírgenes…

Ay…. ¿ A sufrir otra vez o a disfrutar? ¿Qué me deparará Fx? De momento me he puesto las botas de plomo y no le envío un mensaje si él no lo hace primero

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También conocí a KC y madre mía, pensé que soy verdaderamente afortunada por tener cerebro aunque no sea un bellezón.

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“Amor, tranquilo, no te voy a molestar . Mi suerte estaba echada, ya lo sé. Y sé que hay un torrente dando vueltas por tu mente….

Amor, lo nuestro sólo fue casualidad... La misma hora, el mismo boulevard…No temas, no hay cuidado, no te culpo del pasado…

Ya lo ves, la vida es así. Tú te vas y yo me quedo aquí… Lloverá y ya no seré tuya, seré la gata bajo la lluvia  y… maullaré por ti.

Amor… lo sé. No digas nada, de verdad… Si ves alguna lágrima, perdón.  Ya sé que no has querido hacer llorar a un gato herido….

Amor, si alguna vez nos vemos por ahí… invítame a un café y hazme el amor…  Y si ya no vuelve a verte, ojalá que tengas suerte…

Ya lo ves, la vida es así. Tú te vas y yo me quedo aquí… Lloverá y ya no seré tuya, seré la gata bajo la lluvia  y… maullaré por ti.”

Ayyyy, la Dúrcal, como sufría.

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Al final hice caso a Marisa y escribí la carta a Jota. Por supuesto no se la he dado. Pensaba colgarla aquí o el Facebook, pero me dije “¿Pa qué?” y sin dirección, ni sello, ni nada la tiré al buzón de correos… Me pareció menos engorroso que meterla en una botella y tener que bajar a la playa para llenarme los zapatos de arena.

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“Ay alguien por hay diciendo cosas. Diciendo que te deje el paso libre que tú pasas de mí… Bien, pues dímelo tú, cara a cara, yo haré lo que haga falta para que seas feliz…. Dímelo ya, la verdad de la verdad… Y aunque no fueras perfecto, yo te acepto… así.”

Madre mía, la Dúrcal, que mal cuerpo me está poniendo.

“Tú querías que te dejara de querrerrrrrrr y lo has conseguido”

Pero que bien me lo paso.

“Cuando te decidas a volver …estoy a tu disposición…”

Jajaja

“Me gustas mucho, me gustas mucho tú… Me gustas mucho…”

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Bueno, ya se acabó. La Navidad y mi actualización de hoy. No sé cual de las dos es más rollo.

Elvira Cordero. Esperando los efectos especiales (FX)

(Foto: Rocío Dúrcal y Bárbara Rey en “Me siento extraña” de Enrique Martí Maqueda)