Escribir en un blog es como ir al gym. Si lo haces cada día como si fuera parte de la rutina: comer, dormir, ducharse, cambiarse de ropa interior (iba escribir bragas que queda más gracioso, pero lo malo es que también queda más basto)… no te cuesta ningún esfuerzo, pero si dejas de hacerlo un par de días seguidos, necesitas la ayuda de la amiga “voluntad” para retomarlo.
Por eso, sin darme cuenta, hace dos meses y medio que no escribo nada por aquí. Mi amiga Charo dice que si no he aparecido en el mundo ciber (el Facebook también lo tengo abandonado) es porque no lo necesito, que yo cuando no estoy bien necesito escribirlo… Por una vez, creo que tiene razón. Llevo dos o tres días queriendo volver coincidiendo con que me estoy aburriendo un poco de mi relación con Nacho. Le quiero, y es majo, pero creo que no es para mí. Tenemos gustos muy dispares y su “modos vivendis” tan social con los “chonis” me hace alejarme de él. No es que yo sea una mega pija, pero hay cosas que no soporto* y que aunque sé que el problema soy yo, no puedo evitar que me hierva la sangre:
*(-La gente que siempre habla de dinero. Diciendo lo que cuesta lo que lleva de ropa o lo que gasta en comida o lo que le cuesta el tratamiento de acupuntura.
-Los que dicen que no deberían explicarte algo porque es un secreto, pero lo hacen, a mí y a todo el mundo.
-Los que no quieren que les critiquen, pero no paran de hacerlo y con muy mala baba.
-Los que tiran un papel en la calle con la cantidad de papeleras que hay.
-Los racistas con los sudamericanos, los marroquíes y los chinos cuyos padres son inmigrantes también, aunque sea de dentro del Estado, y no entienden que nadie emigra por gusto.
-La mentira. Si no soy yo la que la dice.
-La gente que se gasta el dinero sin pensar en el día siguiente y dando por supuesto que alguien le ayudará.
-Los que se quejan de todo, como yo ahora.
-Los que presumen de tener más amigos que yo, que casi no tengo y a la hora de la verdad… Nanai… Simples conocidos.
-Los que no son capaces de compartir mis gustos y disfrutarlos como yo
-Los que te aman a pesar de todo y que nunca te dejarían aunque se los pongas verdaderamente fácil
-Los y las gordas que no paran de quejarse por su físico comiendo fritos, dulces y de todo y que nos critican a las que estamos delgadas como si eso ocurriese sin ningún sacrificio por nuestra parte
-A las intransigentes, como yo…)
….
Uffff. Estoy mejor. Necesitaba desahogarme y soltar todo lo que no tengo ovarios de hacer a la cara. Y es que estoy harta de ser tan “políticamente correcta”.
Elvira Cordero
(Foto: Nieves de Medina y Tosar. Película “Los lunes al sol” de Aranoa)
